LA INCREIBLE LLAMADA
DEL VIEJITO PASCUERO

La historia actual, cuenta que Santa Claus vive en las cercanías del Polo Norte, junto a la Señora Claus y una gran cantidad de Duendes navideños. Estos, le ayudan en la fabricación de los juguetes y otros regalos que le piden los niños a través de cartas y, ahora, llamadas telefónicas y mails.

Santa es un viejo adorable, muy sabio, querendón y treméndamente mágico, además. Cada año premia a los niños que se portan bien, concediéndoles los deseos más dulces de su corazón. Santa posee artilugios tecnológicos y hechizos poderosos para conocer las historias de cada niño a quien se acerca, le escribe y cree en él. Así, con su Reloj de Anillos, puede detener y mover el tiempo; ve el fondo de los corazones de los niños, con su "Cardi-Telescopio"; posee polvos mágicos para hacer volar y un báculo dorado con el que puede otorgar capacidades especiales. De esta fantástica manera, puede lograr su acometido, cada navidad, celebrando el nacimiento de el Rey del Amor, el Niño Jesús.

 

Para poder transportar los regalos, Papá Noel los guardaría en un saco mágico y los repartiría a las 00:00h del día 25 de diciembre, en un trineo volador, tirado por los «renos navideños», liderados por Rodolfo (Rudolph); un reno que ilumina el camino con su nariz roja, brillante y potente, siendo el último en agregarse a la historia.

 

Santa Claus puede entrar a todos los hogares donde hay niños, al transformarse en una especie de humo mágico; y así entrar por la chimenea o cualquier otro orificio de las casas; si éstas no disponen de una chimenea típica.

 

Ahora bien... Cuenta la leyenda, que si un niño se ha portado mal y su corazón se endurece y no quiere mostrar cariño y obediencia por sus padres, se dice que Santa Claus, le dejaría un trozo de carbón con un "mensaje", explicando al niño qué debe corregir, si desea recibir algo mejor que un carbón para la Navidad.